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martes, 17 de julio de 2018

Crimen de Alcásser. El enigma del escenario intermedio. Canteras y vigilantes de seguridad.








En post anteriores y recientes hablamos acerca de las extrañas fluorescencias de color amarillo detectadas por el profesor Frontela, que “salpicaban o manchaban” las ropas y zapatos de las tres niñas de Alcásser. Un misterio para el que sigue sin haber respuestas.

“…Se ha encontrado una extraña sustancia térrea, de intensa fluorescencia amarilla entre 400 y 570 nanómetros, que también se halló salpicando o manchando las botas de los cadáveres, además de tierra, muestras que es de interés comparar con tierra del lugar donde fueron hallados los cadáveres y de las diferentes zonas donde pudieron haber permanecido las víctimas…”

Lo que arrojaban aquellas muestras era una intensa y extraña fluorescencia “amarilla” que podría ser la prueba más evidente, de que las niñas estuvieron en “otros” lugares desconocidos antes de ser “depositadas” en la fosa de la Romana. El famoso “escenario intermedio” desconocido y que podría ser una de las “claves” de este enigma sin final, llamado “El caso Alcásser”.

En el otro post anterior, buscamos una explicación al origen de esta sustancia presente de forma natural o artificial en “sitios concretos” o en “actividades determinadas”.







Hablamos también largo y tendido de las extrañas piedras de origen desconocido halladas en el interior del cráneo de una de las niñas, dos piedras pequeñas con aristas marcadas. Rastreamos incluso entre diversos minerales con irisaciones de color violáceo.


Los minerales nos llevaron de nuevo a las fluorescencias. Porque al parecer de forma “natural” esa fluorescencias se dan en determinados lugares, tierras raras, canteras.

Igual que en el caso de la fluorescencia existen ciertos minerales  que también tienen propiedades fosforescentesEstos son minerales muy extraños y raros de encontrar, pero muy espectaculares dado que el tener fosforescencia implica que también tienen fluorescencia. Su luminiscencia viene dada, en general, por la presencia de iones de elementos de las tierras raras  en su estructura.

De hecho vimos minerales que cumplen estos mismos criterios: Las famosas “calcitas”
  
“…Cabe destacar la fluorescencia amarilla  de algunas calcitas…”

Observamos la presencia de este tipo de fluorescencias en canteras cercanas a Alcásser.


“…Desde el punto de vista mineralógico decir que como es habitual en este tipo de explotación los minerales que aparecen son la calcita principalmente y, minoritariamente, hematites, pirita y goethita limonitizada. Cabe destacar la fluorescencia amarilla de algunas calcitas”  (extraído del blog MIT mineralogia topográfica ibérica y referido a la cantera abandonada de Torrent )








Una cantera que además llama la atención por sus tierras “rojizas”. No sólo esta cantera, existen otras en la zona similares.


En este tipo de canteras, se dan dos circunstancias muy curiosas: por un lado las denominadas fluorescencias amarillas de origen “natural” y por otro las denominadas “tierras rojizas”

Trasladando estos hallazgos a los hechos criminales que nos ocupan, como hemos visto en el caso Alcásser se detectan este tipo de fluorescencias en prendas y calzado que portaban los cadáveres de las niñas. La misma ropa que llevaban puesta cuándo desaparecieron, y que “anómalamente” aparece colocada en los cadáveres. Es una anomalía porque en delitos sexuales de esta índole y gravedad, no suelen aparecer vestidas por completo las víctimas. Pero es que además aparecen con la ropa mal dispuesta lo que vendría a ratificar la idea de que posiblemente fueron “vestidas”   -chamarreta o cazadora puesta del revés, cordones de los zapatos mal anudados…-

Y las tierras rojizas  el propio padre de una de las niñas de Alcásser se refiere a ellas en un programa documental ilustrando la zona de la Romana, en concreto cita "...Por las tierras rojas que se encuentran pegadas a los cuerpos de las niñas, es más factible que las trajeran de otro enterramiento a enterrarlas aquí ..."-refiriéndose a la fosa de la Romana-. 
Estas tierras rojas son por lo tanto como hemos recalcado en otras ocasiones un detalle "crucial". Curiosamente también las hemos relatado en otros hallazgos. Nuevamente nos vuelven a reconectar con otros casos. Por ejemplo con el caso del pie amputado de una “mujer de baja estatura, que calzaba un número pequeño” hallado precisamente en la calle Alcácer de Valencia capital en el año 1989. En el pie fue detectada “tierra rojiza”. 





fuente: Diario ABC

El pie, al parecer podría pertenecer al cadáver hallado mutilado en Turís y que en un principio se pensó que podría pertenecer a una de las niñas desaparecidas del denominado caso Macastre. Pilar.








Algo que al parecer quedó descartado. De hecho su familia no reconoció aquel cadáver como el de su familiar. Había cosas que no cuadraban. Una cicatriz que no aparecía, las ropas que llevaba no se correspondían con la indumentaria de la joven, etc.

 "Para mi familia, mi hermana está desaparecida, pero no muerta. El cuerpo de Pilar estaba irreconocible, y además tenía una cicatriz en la pierna que no vimos en el cadáver", aseguró Felisa R.  a “Las Provincias” en 1997.

"el pie descubierto en la calle alcácer de Valencia, podría pertenecer al cadáver de una mujer hallada en el interior de una tubería por unos niños, entre los términos de turís y Godella.  Aunque en un primer momento se había sospechado que el pie pudiera corresponderse con Pilar R. la joven desaparecida tras el hallazgo de los menores en Macastre, esa posibilidad HA SIDO DESCARTADA y prosigue su búsqueda creyéndose que podría trabajar en un club de carretera

Esta misma noticia nos ponía sobre aviso, de nuevo, de las ramificaciones del mundo de la prostitución. En este caso prostitución de menores. Algo muy extendido en la época en Valencia como hemos podido comprobar en las hemerotecas.

¿Dónde está Pilar?. ¿De quién era entonces, el cuerpo mutilado encontrado en la tubería de Turís?. ¿Un pie pequeño, de alguien de baja estatura? Todo es confuso a este respecto. Nada parece estar claro. Nada parece estar resuelto.





  

Teniendo en cuenta los factores relatados anteriormente,  las canteras se podrían perfilar como un escenario de mucho interés y a tener en cuenta, en esta concatenación de crímenes sin resolver o con una más que dudosa resolución.
















  



Como siempre hacemos en el blog, cuándo algo es “interesante”, tiramos de hemeroteca para comprobar la actividad criminal relacionada con este tipo de escenarios.

Casualmente en una cantera de Torrent se realizó un macabro hallazgo en el año 2013.

  







La Guardia Civil de Valencia investiga la muerte de un hombre cuyo esqueleto fue hallado el domingo por la tarde en una cantera del término de Torrent. Un equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil de Paiporta recogió los huesos y los trasladó al Instituto de Medicina Legal para su análisis.
Según una primera estimación del forense, la víctima murió hace menos de cinco años. (Las provincias)



La fase de esqueletización aquí sí parecía concordar con la estimación de la data de la muerte –cinco años atrás-. En Alcásser, o en otro caso acaecido en Macastre con una adolescente (Leidy V.), resultó ser todo lo contrario. A pesar de presentar esa misma fase los cuerpos –o parte de ellos- las muertes habían acaecido apenas unos meses antes. Algo inexplicable. Desconcertó incluso a los propios forenses que en el caso del cuerpo hallado enterrado en una fosa en el monte de Macastre erraron sus cálculos. Muy extraño y anómalo.

En la noticia del hallazgo de esta cantera, había más datos interesantes. El difícil acceso a la cantera –vigilada y vallada- y la cantidad de hallazgos de esqueletos que se produjeron ese mismo año 2013 en sólo dos meses. Entre ellos el conocido e inexplicable caso de la Sima de dos Aguas, sobre el que ya profundizamos en otras ocasiones.



"...El lugar donde fueron hallados los huesos se encuentra vallado, por lo que no resulta fácil acceder al mismo.

Los hijos del vigilante de la cantera descubrieron el domingo por la tarde el esqueleto. Tras el macabro hallazgo, el trabajador informó a la Guardia Civil. Junto a los huesos también aparecieron restos de ropa de hombre y unas gafas de vista. Varios agentes acudieron ayer de nuevo a la cantera para buscar más huesos de la víctima. Con este tétrico descubrimiento son ya tres los esqueletos encontrados en la provincia de Valencia en los últimos dos meses. Los otros restos humanos aparecieron en una sima de Dos Aguas y cañar de Alboraia...."



Nuevos hallazgos:


Pero esos tres hallazgos pronto se convertirían en cinco.









"...Con este tétrico descubrimiento son ya cinco los esqueletos encontrados en la provincia de Valencia en los últimos tres meses..."

En Cheste (Valencia) en un paraje de monte bajo, fueron hallados los restos de un niño de entre tres y cinco años, troceados. ¿Troceados = mutilados?
El niño estaba “enterrado” en una fosa. Las alimañas hicieron que los restos afloraran. Este caso es también muy extraño, se llegó a barajar que podían provenir de un cementerio cercano, pero nada parece haber sido aclarado.
Las últimas noticias -2017- sobre el asunto, nos hablan de nuevo de este caso plagado de incógnitas.


"...Tras medir algunas piezas óseas, la forense determinó que el niño fallecido tenía entre tres y cinco años de edad y que llevaba «muchos años enterrado». Además, también se descartó que hubiera restos de un segundo cuerpo de adulto..."


Como curiosidad en esta misma localidad de Cheste estudió Miguel Ricart. Colegios o universidades laborales de marcado carácter religioso.

"...También influyó en su vida un cambio de centro escolar (del colegio Juan Bosco a la Universidad de Cheste)..."








  
Si echamos la vista atrás sobre los citados escenarios –canteras- hay algunos hechos llamativos.

Por ejemplo el extraño ahogamiento de un menor, buen nadador, que presentaba un fuerte golpe en la cabeza, en el año 1974, en las inmediaciones de una cantera próxima al Río Magro –ese río con tantos casos llenos de misterios-  y a Alcudia de Carlet (Valencia).






fuente: diario ABC

La zona dónde se produce el infortunado suceso –Alcudia de Carlet- les sonará por un artículo que publicamos titulado “El tren de las nueve”. En él abordábamos la trágica muerte ocurrida en extrañas circunstancias de tres adolescentes, ocurrida en esa población, achacada a otro accidente, en este caso por atropello de un tren. Un caso sobre el que parecen planear algunas sombras –demasiado parecido al recientemente ocurrido con la niña  Lucía V. ocurrido en Pizarra-Málaga-. 








El extraño suicidio de un adolescente en una cantera de Gandía. Año 1988. Su cuerpo fue hallado en avanzando estado de descomposición y también con un fuerte golpe en la cabeza.





fuente: diario ABC

En otras ocasiones nos encontramos con casos con claros componentes homicidas como el hallazgo de un cuerpo calcinado en la cantera abandonada de Albors-Valencia en el mes de noviembre de 1994.




fuente: diario ABC

Como hemos podido comprobar en no pocas ocasiones, las rocambolescas historias criminales de la Comunidad Valenciana, parecen tener siempre un nexo de unión entre sí. “Algo” que por alguna extraña y misteriosa razón acaba reconectando historias a lo largo de su geografía. 









Nos referimos en esta ocasión a los denominados “crímenes de novios” acaecidos en la zona norte de Valencia en su zona lindante con la provincia de Castellón. Unos casos que ya abordamos hace tiempo por su extremada peculiaridad. Casos también “grupales” con más de una víctima, y con un fuerte componente de tipo homicida-sexual.











Como veremos los “escenarios” son de muchísimo interés. Los implicados de estos crímenes también.
Y el contexto de la época: año 1988 y 1990, muy preocupante. Entre medias se sitúa el caso Macastre  (1989), y posteriormente el Caso Alcásser (1992).



Los espeluznantes crímenes de la Vall de Uxó



“….Vall de Uxó al sur de Castellón, un pueblo blanco recortado bajo la silueta de la sierra de Peñalva. Nunca había visto tantos naranjos en mi vida…”










El primer crimen que fue comparado con el de Twin Peaks en los periódicos españoles, fue el que tuvo lugar la víspera de la nochevieja de 1990 en Vall D’Uxó, un pueblo de la provincia de Castellón. Se refería el periodista al asesinato de una pareja de novios que habían aparecido muertos dentro de un coche a las afueras del pueblo. El chico, de 18 años, fue descubierto con el cráneo destrozado en el maletero. Su novia, de solo 16, tenía el pecho descubierto y había recibido otro disparo en la cara –posteriormente se supo que habían sido dos disparos, uno de ellos de “remate” en la nuca de la joven adolescente-


Dos años antes, en mayo de 1988, cerca de esta misma zona, un joven de 22 años había sido asesinado igualmente a tiros –disparos de un subfusil de asalto cetme- cuando se encontraba en su vehículo con su novia, que en esta ocasión por suerte,  logró huir.



Los sucesos a los que nos referimos se suceden en la misma zona y en las inmediaciones de una cantera.

Las investigaciones transcurren barajando dos hipótesis fundamentales: el conocimiento del terreno y el móvil sexual.
De hecho en el crimen del año 1990 el cadáver de la joven de 16 años aparece semidesnudo. Sin embargo en el del año 1988 tras asesinar al chico, la joven consigue huir, y no abusan de ella. En la misma zona, otra pareja había sido raptada y luego liberada.

En ambos casos se trataba de parejas jóvenes que iban a intimar a zonas apartadas del pueblo.

 ¿Pervertidos, maniacos sexuales, voyeurs?. El pueblo estaba consternado, con razón. Un/unos maníacos andaban sueltos matando y asaltando a las jóvenes parejas de la zona.

En el crimen de los dos jóvenes ocurrido en 1990, fue empleado un revólver del calibre 38. Un arma muy “concreta” que utilizaban en la época policías locales, y principalmente vigilantes de seguridad. En el interior del vehículo dónde fueron encontrados los dos cuerpos de los jóvenes, se hallaron unas huellas dactilares marcadas con sangre, que valieron para identificar al supuesto autor de los hechos. Todas estas pistas llevaron hasta Rogelio E.Z. de 28 años vecino de Madrid, con domicilio en Valencia. Será detenido en enero de 1991.








El asesino de la joven pareja trabajaba como vigilante de una empresa de seguridad en una cantera situada en las inmediaciones del lugar dónde se encontraron los cadáveres. Según los investigadores acostumbraba a observar a las numerosas parejas que se citaban en las cercanías de la cantera. Fue descrito como un tipo con aspecto “paranoico”.

Según la investigación, abordó a la pareja en el coche, hizo bajar al chico y le ordenó meterse en el maletero dónde disparó sobre él dos veces seguidas. Acto seguido se dirigió hacia la joven de 16 años, obligándola a meterse en el asiento trasero, dónde intentó abusar de ella. En el forcejeo -se supone- que el arma se disparó entrando la bala por el pómulo derecho para salir por el izquierdo. Pero la adolescente presentaba otro disparo más. En la nuca. La Guardia Civil cree que el asesino utilizó nuevamente el arma, esta vez para “rematarla”.* Su cadáver apareció con el pecho desnudo.

*En el caso Alcásser, año 1992, las tres niñas serán “rematadas” de un disparo en la nuca.





ilustraciones Profesor Frontela Caso Alcásser.


Con esta detención se esclarecía el crimen de 1990, pero continuaba impune el de 1988 que además, presentaba grandes similitudes.

Las sorpresas no acaban aquí.

El crimen de 1988 también iba a ser esclarecido. Las detenciones se producirían en el año 1993.

“…Miguel Ángel P. R, el preso fugado hace una semana de la cárcel de Picassent (Valencia), fue detenido hace tres días en La Jonquera (Gerona), acusado de matar a Francisco S. en 1988 en un descampado de La Vall d'Uixó (Castellón), cuando la víctima se encontraba con su novia dentro de un automóvil. Dos novios también fueron asesinados en 1990 cuando estaban en un coche en otro descampado de La Vall. Por este segundo crimen fue condenado a 56 años Rogelio E Z vigilante jurado asignado a una cantera cercana, pero Miguel Angel P.R. también trabajó en esas fechas como vigilante de la explotación.  La detención se produjo a raíz de un registro realizado en el domicilio de uno de los presuntos autores de las muertes de 1988, también detenido días atrás, donde se encontraron pruebas que determinan, supuestamente, su participación en los hechos. Entre estas pruebas se encuentra, al parecer, un subfusil ruso.
Según señaló ayer a este periódico el letrado Jesús S-T, acusador particular en el caso del doble crimen, la detención de Miguel Ángel P. R.  y su presunta relación con el asesinato del joven Francisco S, más el hecho de que también trabajó como vigilante jurado en la cantera, "podría llevar a un replanteamiento del proceso y condena a Rogelio E. Z".
(Fuente: diario “El País”10 de noviembre de 1.993)




Si recapitulamos:

-Sorprendentemente “al menos” dos de los asesinos partícipes en ambos crímenes de parejas o novios, habían trabajado como vigilantes de seguridad en la misma cantera. Y posiblemente para la misma empresa.

-El subfusil no era de marca española –cetme- como se había barajado, sino que era de fabricación rusa. El joven muere literalmente “ametrallado”. Sobra cualquier comentario. La mafia estaba instalada de pleno en Levante durante aquellos años. 







Lo abordaremos algún día. Un tema "delicado" de tratar. Peligroso.








Dos disparos a una cría de 16 años. Uno de remate.
-Uno de ellos ejecuta de un tiro en la nuca a una joven adolescente, apenas una cría de sólo 16 años. Una cría que ya había recibido un disparo previo que le había atravesado el rostro de lado a lado. Una frialdad propia de sicarios. Algo sobre lo que ya hablamos en el Caso Alcásser.

- En el crimen de 1988 participó más de una persona, de hecho se detiene a otra más según se cita en el artículo de el país. Además en otras noticias se cita que eran dos los agresores. 

Los hechos se produjeron hacia las 23 horas del domingo, cuando la víctima, acompañado de su novia, Carmen F, de 20 años, se encontraba en el interior de su vehículo. Dos individuos se acercaron y comenzaron a acorralarlo.


En resumen, una historia asombrosa, de película de terror y por momentos inverosímil:

-Un grupo de vigilantes de seguridad degenerados y especialmente sádicos dedicándose a "cazar jóvenes".

-Un sistema de selección en la empresa de seguridad, que debía ser un auténtico desastre, parece que todos los pervertidos, sádicos y psicópatas de España, se enrolaban allí.

-Es altamente llamativo que distintos vigilantes, distintas personas, realicen las “mismas conductas criminales despiadadas”. Podían espiar a las parejas, aprovechando la ubicación de la cantera y su puesto de trabajo nocturno. Podían ser auténticos voyeurs, pervertidos, o parafílicos. Pero de ahí a matar y ejecutar a sangre fría a jóvenes, apenas adolescentes, hay un largo camino. Incluso llegar a ametrallarlos con un subfusil. O lo que es lo mismo: utilizar para alguna de sus agresiones un "arma automática de guerra" es a todas luces inusual. Tráfico de armas, y posiblemente muchas más variantes criminales desconocidas puedan estar presentes detrás de este "aparente" envoltorio de criminalidad sexual. 

  
Siempre nos quedará la duda, si detrás de estos dos asuntos había algo más, o simplemente no acertamos a comprender la extrema crueldad que pueden llegar a demostrar algunos de nuestros semejantes.

Sea como sea, parece un argumento criminal demasiado enrevesado y complejo para una resolución tan simple y sencilla.

El segundo vigilante detenido por el crimen de 1988, se declaró además culpable de otro secuestro de jóvenes acaecido en la zona. A raíz de estos hechos fueron denunciados numerosos intentos de asalto en estas mismas ubicaciones.

Miguel P. R, huido de la prisión de Picassent (Valencia) y detenido el domingo en La Jonquera (Girona), se ha confesado autor del ametrallamiento del joven Francisco S, ocurrido el 8 de mayo de de 1988 en un descampado de La Vall d'Uixó (Castellón), y del secuestro de unos novios en ese mismo lugar.





Paraje de “La Zorra” descrito en la prensa como el lugar dónde suceden los trágicos sucesos. Ubicación aproximada. Cantera sita en el lugar.-Google maps-.




Unos auténticos asesinos seriales despiadados y sádicos con uniforme, que sembraron el pánico en los límites de la provincia de Valencia durante los años más oscuros –finales de los ochenta, principios de los noventa-.
   

Paralelo a estas historias, en el caso Alcásser, hay también un testimonio realmente singular –uno de tantos, porque en este caso todo es especialmente extraño-. Muchos de ustedes lo recordarán.





  


El del cabo del ejército, natural de Picassent, que trabajó como vigilante de seguridad en la discoteca a la que supuestamente según la v.o. se dirigían las tres niñas de Alcásser la tarde-noche de autos. Esta persona realizaría unas declaraciones sorprendentes. A las 48 horas de la desaparición de las niñas conocidos de Antonio Anglés le comentaron al citado cabo que las niñas estaban “enterradas” en un chalé abandonado de la urbanización SierraMar de Picassent, citando incluso que las habían llevado hasta el lugar por un canal de riego –acequia- .

























  
fuente: diario Levante EMV


No menos sorprendente es el relato de "E". el amigo de Anglés que no paraba de repetir: “lo que nos vamos a encontrar, lo que nos vamos a encontrar”. Curiosamente, según se cita en el propio artículo, al parecer este personaje: "E". trabajaba en una empresa de explotación minera –¿cantera?- y de transporte.



Los investigadores comprobaron las citadas "informaciones y revelaciones de estos sujetos" con resultado negativo. No obstante el paraje que inspeccionaron, contenía algún que otro detalle sumamente intrigante...


“…Que yo recuerde no había un canal al lado donde discurriera el agua..."
“…Que es una casa, que aparentemente está medio deshabitada, no se si se utilizara para ninguna labor especial, hay una cantera al lado…”

                                                                                     (Declaraciones Sgto. Uco-Gc)














martes, 29 de mayo de 2018

Alcásser. El pueblo dónde nunca pasa nada. El círculo maldito. Tradición.








Cuándo uno afronta la ardua tarea de investigar un suceso criminal como el Caso Alcásser y todo lo que le rodea, lo primero que debe abordar es el contexto geográfico. El “dónde” o “el porqué los hechos suceden allí o con gente que proviene de allí” y no en otro lugar. Luego ampliar ese círculo hasta cribar poblaciones limítrofes -dónde como veremos también se concatenaron una serie de hechos luctuosos-.

Ese contexto geográfico nos lleva a preguntarnos una y otra vez: porqué Alcásser. ¿Cual fue la razón?. ¿Qué pasaba allí que no pasaba en otro lugar?. Que historial criminal atesora. Que piedras quedan todavía por levantar para encontrar algún hilo del que tirar.

Para muchos Alcásser es un lugar escogido al azar, fruto de la casualidad, la mala suerte, el macabro destino. Para otros Alcásser en cambio, podría tener más peso o importancia en los trágicos sucesos del año 92, de la que se le ha dado por parte de la investigación oficial. Juzguen ustedes mismos.

El círculo maldito.

El círculo está ahí, delante de nuestros ojos. Sólo necesitamos visualizarlo, e interpretarlo correctamente. Encontrar el significado “oculto”.








Antes del triple crimen, existen una serie de sucesos de muchísima importancia porque tienen connotaciones criminales. Dos crímenes “extraños” –el del videoclub, y el de un comerciante local-.  En un pueblo pequeño, apenas deberían suceder estas cosas. Pero sucedieron. Puede entrar dentro de las estadísticas razonables de criminalidad. Un asentamiento relativamente cercano a la capital donde bulle la delincuencia. El caso es que personas oriundas de este mismo pueblo han fallecido cerca de allí también en circunstancias muy extrañas. Vamos a “viajar” unos cuantos años atrás.




En el año 1977 se sucede una extraña desaparición de un comerciante del pueblo de Alcásser. No se olviden de este año, 1977, porque más adelante esta misma fecha, volverá a reconectarnos con  otro crimen sumamente misterioso.

...Paco, el de la tienda de electrodomésticos de Alcásser... Paco desapareció en 1977 y su cadáver fue hallado en un barranco cuatro años después. Nadie fue detenido. Son los otros crímenes de Alcásser.

De este artículo tomamos el nombre del blog, y justamente ahí arranca nuestra investigación sobre “los otros crímenes de Alcásser”. Desde un primer momento nos llamó la atención que algo “no encajaba” en estas misteriosas historias. No eran crímenes pasionales, de violencia de género. Eran “otros” crímenes plagados de misterios.



fotografía artística: fuente Pinterest.


Que en un pueblo como Alcásser –dónde aparentemente no pasaba nada- desaparezca una persona, puede ser “normal” lo que es inusual es que aparezca muerto en extrañas circunstancias –enterrado y metido en una bolsa de plástico- en un barranco cuatro años después. Sin esclarecer.

Pero Paco según la prensa no desaparece en Alcásser, desaparece -como las tres niñas según la V.O-  en Picassent:

…Ni el vecino más pesimista de Alcásser quiere pensar ahora en Paco el de los electrodomésticos, desaparecido hace más de 15 años, también en Picassent, donde encontraron su automóvil. Cinco años después, su cadáver fue hallado en un barranco….

El barranco no lo cita, pero suponemos que es el barranco de Picassent. El barranco con más cadáveres por metro cuadrado de toda España, del que luego hablaremos.

…Tampoco los investigadores han tenido suerte a la hora de esclarecer la misteriosa muerte de Paco, el de la tienda de electrodomésticos de Alcásser, ocurrida en 1977. La ausencia de pistas era total hasta que, cuatro años después, un hombre encontró una bolsa de plástico, semienterrada en un barranco, que contenía el cadáver del desaparecido…(Fuente: El Pais)


Las tres niñas de Alcásser aparecieron enterradas en una fosa, en la cual fue también  encontrado un “misterioso plástico” cubriendo los cuerpos. No sólo en Alcásser, en el caso Macastre también aparece otro plástico debajo de uno de los cadáveres.

Según los testigos presentes en el levantamiento de los cadáveres de las tres niñas en la fosa de la Romana, estos describen la presencia de un “misterioso” plástico que cubría a los cuerpos y objetos hallados en el interior de la fosa.

Que antes de sacar el primer cadáver salieron trapos, plástico salió
"Que la alfombra del todo no cubría a las 3 chicas, se ve si tiraron un plástico pero la mano estaba igual fuera, cubrieron parte de las chicas con lo que no cubrió la alfombra. 

  
De hecho el testigo describe un dato muy interesante: el posicionamiento del plástico –a falta de fotos sobre el levantamiento de los cuerpos in situ y sobre esta pieza en concreto-. Estaba encima de los cuerpos. La alfombra azul –la versión oficial sólo habla de una moqueta verde- se sitúa debajo de los cuerpos recubriéndolos, como si fuera un envoltorio sobre los que estos fueron depositados o como el medio utilizado para facilitar el transporte y el porteo de los cuerpos –de las tres niñas ya fallecidas;  la teoría más realista-  por el angosto camino en pendiente, hasta  la fosa de la Romana.

"Que de encima de los cuerpos vi salir un trozo de plástico he dicho antes. Un trozo de plástico incoloro. Y la alfombra que estaba cubriendo. Que la alfombra estaba debajo de ellas, dentro de la fosa y ellas encima. Que la alfombra era de color azul. Sin lugar a dudas."

Además sabemos también cómo era ese plástico según el testigo:

Que en un principio junto a la madera apareció en primer lugar un plástico transparente, sí un trozo de plástico"
Que de los objetos que salieron había un plástico incolorode los que usan para hacer las barracas estas"


El hombre de la funeraria, daba todo tipo de detalles, para que no quedara ninguna duda.


Que esto estaba encima, que lo que no cubría la alfombra, cubría el plástico pero al brazo que salió no llegaba el plástico. Que ese plástico no me di cuenta si tenía manchas azules. Que tire ahí un plástico que es el que envolvía el ataúd, es de la fábrica. Que yo deje abajo el plástico, pero el que nos referimos era el plástico de arriba. Que el plástico no me di cuenta, lo apartamos de los cadáveres pero la historia de luego ya no la sé. Que era un plástico normal como este. Que no vi nada de pintura. Que cuando salió el primer cadáver, la alfombra la apartamos antes de salir el primer cadáver. Lo primero que se intento a ver la alfombra si la sacábamos pero no se pudo, ni se rompió tampoco, era fuerte. Que antes de sacar el primer cadáver apartarnos la alfombra. Que el plástico estaba encima, el plástico no llegaba a cubrir lo que dejo al descubierto la alfombra."


En el caso Alcásser parece por lo tanto acreditada la presencia del citado plástico incoloro o transparente tapando los cuerpos en la zona superior del enterramiento.
  







¿Porqué tapar o proteger los cuerpos si se les iba a enterrar?

  
Vendría a ser como una especie de protección a la hora de depositar tierra sobre ellos, algo que llama poderosamente la atención, porque las niñas también estaban completamente vestidas –algo totalmente anómalo en casos de violencia sexual, mutilación, etc- . No es un dato insignificante. Podría hablarnos de ese especial “cuidado” con el tratamiento de los cuerpos, que implicaría alguno de esos actos o comportamientos que estudia la psicología criminal atendiendo al posicionamiento o cómo aparecen los cuerpos:
Estamos hablando de un comportamiento criminal “undoing”/ remordimiento que indica cierta culpabilización del criminal a la hora de deshacerse de los cuerpos, por eso actuaría con ese cuidado o mimo a la hora de deshacerse de los cuerpos: viste los cuerpos, los deposita, y recubre con plástico para posteriormente echar tierra encima y cerrar la fosa. Un dato muy revelador.

En Macastre hablamos de ello también al referirnos a la “especial colocación” del cuerpo de Rosario en la cama, con la almohada debajo de la cabeza, cremallera bajada con aspecto de placidez como describiría el pastor que halló los cuerpos.

 ** La posición de la víctima –apuntes sobre psicología criminal-

La posición en la que se encuentra la víctima también tiene que ser tomada en especial consideración. El agresor en ocasiones tiene algún motivo concreto para modificar el estado de la víctima en el lugar de los hechos.
El primero es porque se siente culpable de sus hechos. Es lo que se conoce como ‘undoing’ y se trata de una conducta de remordimiento que lleva al criminal a tratar de ‘deshacer’ su delito lavando el cadávercolocándole bien la ropa, situándolo en la cama con la almohada bajo la cabeza o rodeándolo de sus objetos más preciados. En muchas ocasiones, estas conductas delatan que víctima y agresor tenían una relación previa.

Aunque esta parte ya la abordamos en su día, al tratar sobre el Caso Macastre, conviene volver a hacerse la misma cuestión.

La pregunta es ¿pudo ser vestida de nuevo Rosario después de fallecer? Y respecto a la cremallera del pantalón que tenía puesto el cadáver de la joven ¿porqué aparece abierta y dejando ver parte del abdomen?
Respecto a la prenda en cuestión, según el sumario la joven llevaba puesto un pantalón muy ceñido: “… pantalón vaquero negro muy ceñido…”









En el caso de Valeriano, cuyo cuerpo aparece en un talud o barranco, también esos plásticos hacen otra vez aparición:

El cuerpo de Valeriano, tiene la cabeza dirigida hacia la caseta. Sin embargo se descarta que el cuerpo cayese en la huida, como también se llegó a especular. El cadáver estaba tumbado encima de un plástico, boca abajo, con los brazos –uno mirando hacia arriba y otro hacia abajo-, en otras informaciones  se cita “en cruz”. 

Pero volviendo de nuevo al pueblo de Alcásser, dos años antes de la desaparición de las tres niñas, sucede de nuevo, algo horrible.

El “crimen del videoclub”, en la población de Alcásser. Ocurrido un 28 de abril de 1.990, un sábado.
Asunción N. de 27 años que atendía el “videoclub” de la localidad, es salvajemente asesinada a cuchilladas por un menor de tan sólo 14 años de edad vecino de Alcásser.
El agresor atesorando una gran sangre fría, regresa a su casa, se ducha, se cambia de ropa y huye dirección a Silla. Será un maestra de Alcásser la que recoge al agresor y lo lleva hasta dicha localidad. Según esta, el joven tenía la mano con arañazos y restos de sangre. Reconoció sin dudas al joven como al supuesto autor de los hechos, tras serle mostradas fotografías del sospechoso por parte de la Guardia Civil.








El posible móvil del crimen fue un robo. Fue cometido al mediodía. ¿Porqué no esperar al final de la tarde, para obtener una mayor recaudación?. Es un caso extraño también, dónde la acción –atraco a un comercio con escasa recaudación, no justifica la acción criminal desatada o el cierto grado de ensañamiento que este tuvo con la víctima: “…“varias” cuchilladas…” (fuente: El país)

El misterio no acaba aquí. El joven autor de los hechos, estuvo CINCO años desaparecido de la justicia. Parapetado o amparado por alguién que le dio la cobertura necesaria para huir de un crimen tan atroz. Cuándo cumplió la mayoría de edad consciente de la prescripción del delito se entregó voluntariamente en Valencia.

"Lo tenía bien claro cuando se entregó; le han asesorado bien", afirma un abogado de Valencia que prefiere no identificarse

Bien asesorado, bien parapetado, bien protegido. Menor. De Alcásser. Miedo.
  
Dos asuntos criminales “extraños” por sus características y por su  también extraño devenir.
  
Con posterioridad a 1992, aparte de las noticias sobre el triple crimen, existen contadas noticias, cuasi camufladas, cuatro líneas. Tabú.

La joven vecina de Alcásser que aparece en la acequia de Sumacárcel* en 1997 sobre la que hablamos largo y tendido. Haciendo especial hincapié en esa misma idea que nos sigue sobrevolando una y otra vez, quizás porque nos trata de indicar algo que no ha sido correctamente interpretado o valorado en su justa dimensión:

Como ya hemos relatado, se trataría del anómalo suceso, de que  4 chicas jóvenes vecinas de un mismo pueblo aparezcan asesinadas y maniatadas en un escenario final con ubicaciones misteriosamente muy próximas también, con cuatro años de diferencia. Mismo origen, mismo final. Incluso en el camposanto dónde reposan también a muy escasa distancia. ¿Macabras casualidades del destino o hay algo más?.

*En Sumacárcel aparecerá también en una acequia otra mujer joven también maniatada, con la cabeza cubierta por una bolsa de plástico –igual que la joven de Alcásser- “vestida” y lastrada con piedras. Según la prensa su marido había denunciado su desaparición.
“…Cuya desaparición había sido denunciada el pasado miércoles por su esposo, director de la banda de música de la localidad de Antella y ex-director de la de Sumacárcer….” (fuente: El país).

Bandas de música. La Valencia más tradicional.

Victimas de una misma zona. Las querencias, piezas de caza para el cazador. El depredador.


Hay un pasaje de la caza al rececho, que es muy ilustrativa en cuánto al comportamiento del cazador respecto a sus piezas de caza

“…Resulta fundamental el conocimiento del terreno, las querencias de los animales, su abundancia y localizaciónUna vez localizada la pieza, se realiza la aproximación con el viento en contra, para evitar ser detectado. El lance se efectúa cuando se está a una distancia adecuada de tiro…”

El “conocimiento” del terreno: –el origen de las víctimas y el escenario final dónde son descubiertas o halladas, pasando por el  escenario “intermedio” –desconocido pero posiblemente no muy distante de estos dos escenarios, y que es el lugar dónde realmente se consuma el crimen-. Nunca encontrado. En él están todas las claves “perdidas” de estos crímenes. La base.










Las querencias de las víctimas: Dónde se mueven estas. Dónde son más vulnerables. Cuales son sus aficiones, gustos, horarios, rutinas –las rutinas matan, dado que son propicias y proactivas para el cazador-.

Si volvemos al símil de la caza. El jabalí siempre acude por el mismo camino, al mismo sitio, a la misma hora. Por eso los furtivos detectan su horario intempestivo mediante relojes trampa, para “fijar” la hora concreta del acecho desde un árbol o refugio. No suele desviarse demasiado. Es una presa relativamente fácil. Las rutinas son la clave. ¿Qué hacían, dónde se movían,  aficiones comunes.?  Los “ojeadores” frecuentaban las discotecas de menores en aquella época por alguna razón desconocida, lo hemos visto al investigar otras “desapariciones” que abordaremos en otros post.


“…Hombres de más edad de lo habitual en Coolor, clientes antiguos, han sido investigados, pero la Guardia Civil ya sabe que se marcharon hace meses de Picassent….” (fuente: El país 14/12/92)


Evitar ser detectado: el arte del engaño, dónde el cazador lleva a su víctima hacia el punto dónde la espera o acecha. –El jabalí baja a la balsa a beber y desparasitarse, o es atraído por al olor de la gasolina que el trampero ha depositado previamente como reclamo-.

La trampa, el engaño, el reclamo, el cebo, el gancho. La víctima va directa hasta su territorio sin sopesar el peligro que le acecha, y el cazador se siente realizado. Está libre de riesgos, libre de miradas indiscretas o posibles testigos. Atrae a la presa a su territorio.  Domina la situación. Tiene el control.







El escenario “intermedio” –el gran desconocido de estos casos- un lugar aislado, blindado de las miradas y los oídos. Dónde el cazador atrapa a la pieza sin dejarle escapatoria. Trabaja con tiempo, lo necesita para cometer todas sus barbaridades y aberraciones –tortura, mutilación, abusos sexuales repetidos, ¿grabación? ejecución, preparación de los cadáveres.


Estamos hablando de un proceso criminal muy elaborado que requiere: tiempo, intimidad, logística y tranquilidad. Organización.

Tiene el poder, domina la situación, conoce el terreno, los lugares por dónde huir precipitadamente si algo sale mal,  se siente invencible.  Por eso repite, y vuelve a matar. Y lo hace en “serie” para calmar su sed irrefrenable. Su pulsión enfermiza y obsesiva.

Y sus víctimas son parecidas: pertenecen a grupos concretos:  pandillas de adolescentes que se mueven en grupo, o mujeres jóvenes más mayores e independientes, aisladas.
Si necesitan gran cantidad de víctimas a la vez, en una sóla acción –algo sumamente llamativo, anómalo, muy identificador- , nos puede indicar que son varios, posiblemente demasiados, los integrantes de esa particular “manada de asesinos” que actuó durante los años ochenta –noventa en esta Comunidad. Asesinos que tienen la logística para retener y tiempo para prolongar el cautiverio sin riesgos.


  
Resumiendo y recapitulando:

Cercanía del “enlace” o intermediario, a las víctimas por razón de alguna conexión desconocida –posiblemente lugares de ocio, aficiones comunes, etc- algo linka a este eslabón fundamental, con los distintos grupos de víctimas. Hay un/una conseguidora de víctimas “a demanda” por encarga. Suponiendo que las víctimas no hayan sido asaltadas violentamente o con intimidación –arma de fuego como la utilizada en la ejecución- cosa que parece descartada a priori, por lo arriesgado de la acción para los autores de los hechos. Al tratarse de varias víctimas en “grupo” algo podría ir mal, dejar flecos sueltos y alertar sobre su proceder a las autoridades.


En Alcásser tenemos constancia de otro hecho criminal posterior. 2 de Junio 2012

Hallan dos cadáveres en campos de naranjos de Alzira y Alcàsser


El fallecido en l'Horta presentaba signos de violencia, mientras que el de la Ribera estaba muy descompuesto


Dos cadáveres aparecieron ayer en campos de naranjos en Alzira y Alcàsser. 
El cuerpo encontrado en el municipio de l'Horta podría presentar, según una primera inspección ocular, signos de violencia, La identidad del fallecido de Alcàsser, que tendría unos 50 años de edad, no trascendió ayer. Podría llevar muerto un par de días. Lo encontró un vecino que dio el aviso a la policía.
(fuente: Levante-EMV)


Ese mismo día 2 de junio de 2012,  como describe la noticia se concatenan dos hallazgos:  uno en un campo de naranjas de Alzira, sobre un colchón,  junto a una caseta de aperos. Y la del vecino de Alcásser, hallado en un campo de Alcásser que presentaba “signos de violencia”. Nada más se sabe de este caso. Silencio.

El caso es que indagando un poco hemos encontrado una serie de curiosos asuntos ocurridos en estas mismas fechas. Tan sólo seis días antes de estos terribles hallazgos en Alzira y Alcásser es encontrado un cadáver en Tous. El día 27 de mayo de 2012.

Encuentran el cadáver de un hombre en el pantano de Tous



Un hombre fue encontrado muerto ayer por la mañana en extrañas circunstancias en las aguas del pantano de Tous. La Guardia Civil de Sueca investiga si la víctima falleció ahogada tras caer de forma accidental al embalse después de que el forense no hallara signos externos de violencia en el cadáver.

El cuerpo presentaba escoriaciones:

Tras una minuciosa inspección del cuerpo, los especialistas no hallaron signos externos de violencia, aunque presentaba escoriaciones compatibles con las que produciría una posible caída accidental

Una “caída accidental” con escoriaciones. Algo compatible con este tipo de supuestos: “precipitaciones”, dónde las lesiones más graves son internas. Piel intacta o poco afectada, destrozos internos muy graves -Manual de Criminalística y CC Forenses-.

Precipitación accidental, suicidada u homicida. Esa es la cuestión a dilucidar.







Sorprendentemente cinco días antes del hallazgo de Tous, el 22 de mayo de 2012, es hallado el cadáver de otro hombre flotando en el río Júcar en su confluencia con el Río Magro en Algemesí –cercano a Tous-. Aquí todo está “cercano”.






Efectivos de bomberos han rescatado hoy el cadáver de un varón de, aproximadamente, 40 años de origen latinoamericano en el paraje de La Xopera de Algemesí. El cuerpo fue hallado flotando en el río Júcar a la altura del  puente, frente al embarcadero de las piragüas, junto a la confluencia con el río Magro. Al parecer llevaba muerto entre 48 y 72 horas y han intervenido en el rescate el sargento y los bomberos de Alzira. La policía judicial se ha hecho cargo del caso para esclarecer las causas de su muerte. (Fuente: Ribera express)








Resumiendo: cuatro varones son hallados muertos en “extrañas circunstancias” en la Horta sud en cuestión de diez días en el medio acuático.  Una frecuencia de hallazgos endiablada, comparable a lugares tan castigados como Ciudad Juarez-México. ¿Es esto normal o anormal?







Picassent. El barranco del diablo

Alcásser y Picassent están divididos por un barranco que rodea a este último pueblo. Un barranco dónde el mismísimo maligno parece haber establecido una sucursal, abierta las 24 horas.


Sobre Picassent pueden encontrar varios artículos los lectores en este blog. Un lugar especialmente proclive a la aparición de cuerpos en sus campos, pozos, barrancos. La hemeroteca está plagada de sucesos similares. Citaremos sólo algunos de los más impactantes a modo de resumen.

-El crimen de “El loco”. El traficante con curiosos tatuajes que acudía a una orgía y cuyo cuerpo apareció descuartizado en el barranco de Picassent. En este crimen estaba implicada una prostituta –posiblemente oriunda de Alcásser por sus apellidos- y un Argentino al que seguimos el rastro hasta Sudamérica para descubrir que la prensa de su país, resaltaba su pasado oscuro y le atribuía “negocios sadomasoquistas” en Valencia. Todo muy interesante. No hay constancia de que los sospechosos fueran condenados en juicio oral.

-Una mujer que había sido religiosa –monja- fue degollada en las inmediaciones del barranco de Picassent. Otro crimen inexplicable, sin resolver. Degollada por un hombre joven sin piedad de forma premeditada, a primera hora de la mañana, conocía sus pasos, sabía que se iba de viaje. Cercanía.

-Una mujer y su hijo –menor de edad: 15 años- aparecen asesinados en el interior de un pozo de la partida de Terrabona de Bernat en dicha localidad. Los cuerpos aparecen torturados. Para darnos una idea de lo que se encontraron los agentes del orden, basta oir las palabras de la La Guardia Civil que calificó este caso  como "uno de los más fuertes que se han producido estos últimos años en Valencia". Fue en el año 1989 el mismo año del caso Macastre. De hecho las víctimas –madre e  hijo- también provienen de un barrio obrero de Valencia: La Fontsanta, muy cercano a los barrios de los tres de Macastre: Benicalap, Benimamet, Parc Camales-.
Ese mismo fin de semana es hallado otro hombre en otro pozo de Picassent.

-Durante la búsqueda de las tres niñas cuándo se disponen a inspeccionar esos mismos barrancos de Picassent dos motoristas todo terreno de Protección Civil son arrollados por un vehículo 4x4 que se dio a la fuga, en un tramo completamente recto de carretera. Uno de los voluntarios de Protección Civil fallece en el atropello, el otro queda malherido.






Picasssent es importante, porque allí al parecer puede situarse el escenario de la desaparición de las niñas –según la V.O.- , y además las niñas acudían a la famosa discoteca de esa localidad con bastante frecuencia.
Pero quizás existan todavía más claves en el pueblo cercano de Silla. De alguna manera parecen reconectarse temas concretos de Alcásser como veremos en el siguiente desglose de sucesos. Enseguida podrán comprobar como “algo raro” parece desprenderse de esta secuencia. Gato encerrado.


Silla: Los crímenes sin resolver. Macabros hallazgos

Silla el otro pueblo más cercano a Alcásser, también encierra algunas incógnitas realmente sorprendentes:

A Silla, precisamente huye el menor asesino de la mujer joven del videoclub. A esa misma población de Silla al parecer iban las tres niñas con una frecuencia importante aquel verano de 1992, el último que pudieron disfrutar. Y Será precisamente en Silla dónde en 1984 se realiza un macabro hallazgo.

Otro vecino de Alcásser aparece muerto en extrañas circunstancias, así lo describe la propia prensa,  en una fosa en la población vecina de Silla. Su cuerpo fue hallado en avanzado estado de descomposición y desnudo de cintura para abajo. Llevaba 15 días desaparecido. Por los apellidos podría tratarse de un hombre relacionado con el mundo de la pirotecnia.



fuente: diario ABC
  
Pirotecnias, fallas, bandas de música.  “La Valencia tradicional.”

Otro macabro asunto, muy curiosamente ocurrido en el año 1977, -el mismo año que desaparece Paco el comerciante de Alcásser cuyo cuerpo será encontrado cuatro años después enterrado en un “barranco” metido en una bolsa- sucede un hecho sin explicación en la localidad de Benifaió población prácticamente pegada  a Alcásser, Picassent y Silla.






En el lugar conocido como “camino de Covete” en un campo un agricultor descubre un montón de huesos humanos y piedras calcinadas. Se trataba de restos humanos amontonados, y posiblemente quemados en esa especie de “horno” natural o rudimentario. El cuerpo presentaba un terrible traumatismo craneal anterior.












 
fuente: diario ABC


El cadáver no había sido identificado, pero indagando un poco más sobre este suceso obtenemos datos relevantes:





El cuerpo pertenecía a un vecino de Silla. José S.Z. Dicha persona trabajaba en la Gasolinera de la citada localidad vecina de Alcásser.







Del suicidio a lo bonzo….se pasó a una agresión múltiple “vengativa” o a un ajuste de cuentas. Gran cantidad de “hechos contradictorios” según cita el propio ABC. El hombre había sido golpeado en la cabeza antes de ser quemado. De hecho cita que se encontró una sustancia parecida al “serrín” en el interior de la cabeza. Por si fuera poco, al cadáver le faltaba una pierna, que sería encontrada lejos del lugar. La desaparición de la víctima había sido denunciada faltaba de su casa desde el domingo anterior.









Si el suicidio “a lo bonzo” estaba descartado, y la hipótesis homicida era la más apropiada. ¿Quién era el extraño individuo que compró varias garrafas de gasolina y que tenía acento “castellano”? El extraño forastero del que nunca se supo nada más.















En la gasolinera de Benifaió en el año 2002, también es hallado el cadáver de un hombre de 32 años víctima de una “paliza”, en medio de un verano especialmente sangriento, como describe la prensa de la época. 
  

Gasolineras.

Uno de los últimos lugares dónde supuestamente fueron vistas con vida a las 20:30 horas según cita la prensa –dos testigos más asegurarían verlas desde este punto-.







cabecera diario ABC

Si nos quedamos por un momento anclados en esta gasolinera observamos que está situada también en un lugar peculiar.    
A escasos metros del barranco* que divide Picassent y Alcásser.

El barranco de Picassent es un curso de agua intermitente de la provincia de Valencia que desagua en el lago de la Albufera.
El barranco se forma por la unión de otros dos barrancos, el de Don Félix  y el de Niñerola.  Discurre por tierras de cultivo, con escasa pendiente. Después de su unión, el barranco de Picassent rodea dicha población, alcanzado una anchura de 80 a 100 metros.

Las niñas desaparecen no muy lejos de allí según la v.o. Habían llegado “a dedo” hasta la gasolinera, y un poco más adelante –a pesar de estar próximas a la discoteca- volverían a montar a otro coche. Sin embargo las niñas según una de sus íntimas amigas no montaban con cualquiera. En otras ocasiones habían rehusado montar. Sólo lo hacían con gente conocida o con personas mayores que les infundieran confianza. Además las niñas no tenían pensado ir a la fiesta de la discoteca. Y una de ellas, tenía una cita esa tarde-noche, como aseguró el Teniente Alcalde del pueblo, para probarse un traje de fallera. Algo que para ella era una auténtica devoción. Si hay algo “tradicional”, sagrado e intocable en Valencia son las Fallas. Con su casal o local/ sede de cada falla o agrupación, dónde todo el año se preparan para esos días de fiesta. Los fuegos artificiales y la pólvora de las mascletás –pirotecnia- la música de las bandas. La Valencia más tradicional.








¿Dónde fueron las niñas realmente? Es un misterio ¿Quién las recoge? ¿Quién las lleva a ese escenario intermedio nunca hallado?. La incógnita sigue sin despejarse a día de hoy. Sólo tenemos una certeza: las niñas salen esa tarde de Alcásser. El destino es desconocido. Por lo tanto hay que rebobinar y dar marcha atrás para resituarse de nuevo. Para volver al punto dónde son recogidas por primera vez. Algo no cuadra en toda esta historia.


En Silla, por desgracia, han seguido sucediéndose sucesos muy intrigantes.

Recientemente se produjo un macabro hallazgo. Otro más de esa interminable lista de “hallazgos de restos humanos” que salpica la geografía valenciana. O ese extraño y enigmático "feedback" de los nombres de las calles dónde se producen los hallazgos -al que siempre hay que prestar atención-. C/Alcásser en Valencia. C/Valencia en Silla. 

Investigan el hallazgo de huesos humanos entre escombros en un solar de Silla

11 noviembre 2017

Un médico forense, vecino del municipio, descubrió los restos cuando paseaba con su perro por esta zona cercana a la vía del tren.
La Policía Judicial investiga el hallazgo de varios huesos humanos en un solar del municipio de Silla hace unos días. Los terrenos, ubicados en la calle Valencia, están sin edificar, con maleza y algunas acumulaciones de escombros. Hasta ahora están acordonados, con el precinto de la Guardia Civil, para preservar el lugar por si es necesario investigar de nuevo sobre la parcela.

Los hechos ocurrieron hace unos días de forma casual, cuando un médico forense, vecino del municipio, paseaba con su perro por este solar, cercano a las vías del tren, y frecuentado por propietarios de canes. El hombre descubrió un hueso en el suelo a simple vista que, según su apreciación y experiencia profesional, podrían ser de origen humano.
Fuente: Las provincias. Texto y fotografía.

Se habló de que los restos podrían provenir de un cementerio, ya que aparentemente no tenían indicios de violencia ¿pero qué hacían en ese solar?







Alcásser: ¿el pueblo dónde nunca pasa nada?

Si recapitulamos y volvemos sobre el leit motiv del post: Alcásser, ese pequeño y “tranquilo” pueblo cercano a la capital  y echamos cuentas, tenemos un saldo de al menos –casos conocidos o de los que existe constancia en prensa - OCHO vecinos y vecinas de esa localidad muertos en “extrañas circunstancias” o con connotaciones claramente “homicidas” desde el año 1977 hasta nuestros días. Una estadística llamativa, para un pueblo de pequeñas dimensiones con una población media durante este periodo de tiempo de unos 8.000 habitantes. Muchos de los casos descritos además comparten un nexo común: la impunidad o la falta de autores conocidos.


Si volvemos por un momento sobre el Caso Alcásser y la fase de desaparición de las tres niñas originarias del citado pueblo, la única certeza con la que contamos, es que las niñas salen esa tarde de Alcásser con rumbo desconocido. Pero probablemente con un destino muy cercano geográficamente. No podían ir demasiado lejos. El horario de llegada era bastante estricto. La tarde en invierno es demasiado corta.

Si replanteamos algunas piezas del puzzle y nos centramos en las víctimas: unas niñas de esta edad, sin vehículo, sin grandes ni frecuentes desplazamientos fuera de ese círculo o triada que conforman Alcásser-Picassent-Silla y sin conexiones aparentes en la gran ciudad de Valencia, su círculo de amistades-conocidos se circunscribe o reduce claramente a ese mismo entorno geográfico. Gente de su misma edad, de ese micromundo cerrado, hermético que conforman los adolescentes en esas tempranas y convulsas edades. Dónde un chico de 18 años es un mayor, y un hombre de 40 es un abuelo.  Amigos, pandillas, conocidos. Colegio, pueblo, discoteca, aficiones. Es el entorno en el que se movían las tres niñas. Y quizás sea ahí precisamente dónde se encuentren algunas de las claves perdidas de este caso.






A día de hoy sabemos que las niñas eran originarias de este pueblo, que desaparecen en sus inmediaciones, porque esa tarde sabemos con seguridad que parten de sus domicilios. El resto es humo. Un relato desdibujado o etéreo. Por veces inverosímil. Un recorrido hipotético en base a unos testimonios sumamente dudosos, o a unos avistamientos que en muchas ocasiones quedan en entredicho o no se sostienen. Algunos altamente llamativos y rocambolescos. En concreto los últimos personajes que las ven con vida, físicamente, de hecho declaran que las trasladan en un coche averiado. “Los últimos que las ven con vida”. Hoy en día cualquier criminalista de la policía judicial, sabe de sobra que este sería un testimonio clave, un diamante para la investigación. Pero en aquel tiempo parece que sólo fue tomado en cuenta para trazar ese recorrido hipotético de las niñas en su discurrir hacia la localidad de Picassent. Esa letanía o relato –el del recorrido que las sitúa fuera de Alcásser- tenía que ser lo más coherente posible, para sustentar la teoría principal o hipótesis nuclear –que Ricart y Anglés eran los individuos que recogían en su vehículo –que no coincidía con el descrito por la testigo- a las tres niñas que hacían autostop (aunque estas jamás de los jamases se hubieran subido con dos quinquis fichadísimos que nada bueno podían reportarles, estando a escasos centenares de metros de la discoteca)-. 

Teoría sobre la cual se apoyó y giró buena parte de la investigación del caso criminal.

Con ello se  conseguía resolver parcialmente o dar carpetazo de forma rápida a uno de los casos más dramáticos, complejos y mediáticos de la historia criminal española.

El problema, vendría después, al filtrarse el sumario, la instrucción o investigación y las fotos de las autopsias.

A día de hoy esa resolución parcial, ni convence, ni esclarece absolutamente nada. Y lo peor, es incapaz de sostenerse en pie a poco que sople el viento.








“…El año pasado, o sea, en el 92, íbamos a Silla porque allí estaba un grupo de amigos que teníamos, y pasamos todo el verano con ellos en la piscina o en la heladería, y algunas veces también en la playa, íbamos en el tren desde Silla a Cullera, y el camino desde aquí a Silla, los veranos por la tarde, siempre íbamos a dedo, todos los días, y al volver igual, menos un fin de semana que nos llevó mi madre a Silla en coche; pero luego la vuelta siempre la hacíamos a dedo, o con el bus o andando... También hemos ido bastante a Silla andando…”

Marisa R. E  amiga de las niñas, extracto “Sin Piedad” Martínez Láinez.