Antonio Anglés, ese personaje que circula siempre a caballo entre la ficción y la realidad, como un fantasma empuñando una guadaña, y con abrumadoras facultades
para la huída y el salto al vacío –desde un edificio en Catarroja o desde un
buque a las frías aguas irlandesas-, nunca hallado, nunca más avistado.
Desaparecido, para siempre….paradojicamente como tantas otras víctimas jamás
encontradas…
Antonio Anglés y su compinche, metidos en el tráfico
de drogas en discotecas o a la puerta de institutos. Pequeños comerciantes del
negocio de la droga que colocan al menudeo pequeñas cantidades. Mäs que posible ramificación
o eslabón a su vez de otra mafia mayor –la que mueve grandes cantidades-, en
una comunidad autónoma con muchos potenciales clientes jóvenes. La fiesta en
Valencia en aquellos años, estaba asociada a las drogas y la música
-discotecas-. Eran indisolubles. El negocio también.
Junto a esas discotecas,
también desaparecen adolescentes.
Los tres adolescentes del caso Macastre (Valencia)
año 1989, de hecho son vistos por varios testigos el mismo día que desaparecen
bailando en una discoteca cercana a Catadau, concretamente en Montroi. También
frecuentaban unas casas abandonadas de Catadau, descritas como un caos de
yonkis y desarraigados. ¿Qué poderosa razón llevaba a estos tres jóvenes
Valencianos a escoger aquella zona concreta y no otra?. ¿Cómo llegan a la
caseta de Macastre? ¿Quién los lleva hasta ese lugar inhóspito y no frecuentado
por menores, desde la localidad dónde son vistos por última vez en la
discoteca?.
No sólo en Valencia:
Las dos adolescentes desaparecidas en Aguilar de
Campoo-Palencia ese mismo año 1992, se “esfuman” para siempre, cuándo
regresaban también de una sesión de tarde en una discoteca cercana a esta
localidad de Palencia. A día de hoy siguen desaparecidas.
Hechos luctuosos que suceden en días de ocio: fines
de semana, vísperas, o festivos. Días y lugares propicios para la caza por
parte de depredadores de adolescentes. Víctimas potenciales, en lugares de ocio
masificados, dónde ojear y posteriormente seguir/abordar a las víctima
escogida, sin levantar sospechas. Hasta ahí, todo parece ceñirse a un modus
operandi “normal” o “típico” en este tipo de hechos o sucesos criminales que
por desgracia acontecen con demasiada frecuencia.
Pero no parece
demasiado sencillo o frecuente si ese mismo ejemplo lo trasladamos a los casos
que nos ocupan: abordar a varias
adolescentes de forma grupal –casos excepcionales y contados- , que sin lugar a
dudas, opondrían fuerte resistencia a un intento de rapto o complicarían en
grado sumo al criminal-es que intentasen algo así. Salvo, con un método basado
en el engaño, la confianza/cercanía a las víctimas, o la trampa, en el que las
víctimas van directas hacia su perdición, sin tan siquiera llegar a imaginarlo.
También un arma de fuego que intimidara a las
jóvenes, o un policía full, falsos policías con documentación falsa, que las
hiciesen subir a algún vehículo con la disculpa de algún trámite oficial.
O cabría otra posibilidad, aprovechar la oportunidad
de recoger en la carretera a grupos de adolescentes que regresan de estos
centros de ocio, y practican autostop. Algún caso criminal existe en nuestro
país relacionado –pero con una sóla víctima-. De ser así el azar, jugaría un
rol demasiado importante, imprevisible, arriesgado, y difícil de controlar,
para el criminal que realiza un hecho de esta magnitud.
¿Qué lleva entonces a un grupo de adolescentes a irse
con otras personas a algún lugar determinado?. Ese mismo factor “grupal” puede
dar una sensación de seguridad –falsa- a las víctimas, para afrontar actitudes
de “riesgo” o tomar decisiones que individualmente jamás llevaría a cabo. Pero
sin duda, tiene que existir cierto grado de “confianza” o un conocimiento
previo entre víctimas y autores de los hechos –o intermediarios- que llevan a cabo tal acción criminal.
Por eso en el caso Alcásser, se hace verdaderamente
difícil, plantearse siquiera la hipótesis de que tres crías de un pueblo
pequeño –dónde todo el mundo se conoce- , suban a un coche plagado de
delincuentes comunes, camellos o trapicheros, conocidos en toda la comarca, cuándo apenas les restan
unos cientos de metros para llegar a una discoteca. Inviable.
La pregunta que deberíamos hacernos es:
¿qué atrae
poderosamente a unos adolescentes en esa edad?: la música, el baile, la fiesta,
sus propios congéneres. ¿Quién es capaz de ganarse la confianza de un
adolescente?, generalmente alguien de su propia edad y condición, o alguien con
alguna oferta tentadora –modelos, casting o relacionados con el mundo
artístico-.
Sea como fuere, por alguna poderosa razón, varios
grupos de adolescentes, cayeron en alguna “trampa” indeterminada, en puntos bien
dispares de la geografía española durante ese año 1992 (A.de Campoo y
Alcásser), y tres años antes en Macastre. Los crímenes o desapariciones
grupales de riesgo o larga duración son un “rara avis” en la historia criminal
española, pero por alguna extraña razón en
esos tres años se concentran los tres casos más inquietantes y trágicos
acontecidos en nuestro país. ¿Existen algún nexo común entre ambos hechos o
son casos sin relación alguna?. ¿Quién-es estaban detrás de estas
desapariciones y posteriores crímenes de adolescentes?. ¿Porqué y para qué?.
Preguntas sin respuesta.
Volviendo sobre la vida y obra de los dos condenados por
el crimen de Alcásser, sobre los que planean múltiples incógnitas.
La primera: que el perfil de estos dos delincuentes
comunes no se ajusta para nada con el atroz triple crimen por el que fueron
condenados. El grado de sadismo y la violencia sexual desatada, no se corresponde con el de dos varones sin
antecedentes por delitos sexuales o de sangre, anteriores. Tampoco parece
corresponderse con el de un padre afectuoso con su hija pequeña, como nos es
descrito Miguel Ricart. Además no sólo se trata de una triple agresión sexual y
tortura sin parangón en la historia criminal española, sino que para más inri, los hechos se consuman con una implacable e
inaudita ejecución sumaria con un tiro en la nuca. Disparos realizados a escasa o corta distancia, con un
calibre pequeño *, que podría indicar pericia con las armas y una sangre fría
impropia incluso de los sicarios o los terroristas más despiadados. Hablamos de
la ejecución de tres adolescentes, casi niñas, de catorce y quince años.
Un verdugo demasiado experimentado, enfermo o adoctrinado,
al que no le tiembla un ápice el pulso, llegada la hora de cometer un acto tan
sumamente cruel. Un acto propio de alguien frío, no íntimo -no toca a la
víctima como en un estrangulamiento p.ej. y además totalmente desligado del
trasfondo sexual que impregna el hecho criminal. Y lo realiza-n hasta en tres ocasiones. Que
los perfiladores criminales adiestrados en estas técnicas me retifiquen, pero a
todas luces, estos hechos no parecen compatibles en absoluto con el perfil de
dos delincuentes comunes como los citados.
*El calibre del arma empleada para la ejecución de
las menores es también "peculiar", pues no busca ni reune ninguna de
las "cualidades" que se le requieren a un arma corta:
potencia de fuego,
fiabilidad, acierto, capacidad de alcance o destrucción del objetivo, ¿a qué
intereses puede obedecer entonces la elección de este tipo de calibre?
(9mm corto un cartucho
compacto y ligero, pero tiene un alcance relativamente corto y menos poder de
parada que otros cartuchos de pistola modernos), Las voces más críticas con
este calibre esgrimen como argumentos principales para su ataque su falta de
potencia y su escasa precisión en distancias medias. En cierto modo, no
están exentos razón, ya que a partir de 50 metros la precisión
con una pistola del 9 Corto se queda bastante por debajo de lo que podemos
conseguir por ejemplo con una del 38 Special o con una del calibre 9x19mm; De
la misma forma, es cierto que en distancias cortas, o cuando se requiere una
munición con un alto poder de parada, el 9 Corto vuelve a quedarse lejos de
los resultados de potencia que se pueden obtener con calibres más pesados
como el .40 S&W o el .45 ACP.
¿Cual es entonces la
principal ventaja de este calibre corto?: dado que sus cartuchos son más
ligeros y compactos que los del resto de municiones de arma corta que se usan
para defensa, con el 9 Corto se pueden alimentar pistolas más pequeñas y
ligeras, por lo que, lo que tal vez se pierda en potencia, se
gana en comodidad de porte y facilidad de ocultación.
Lo que vendría a suponer una segunda arma, o arma de
defensa personal, pequeña, ligera y manejable,
para ser portada habitualmente o fuera de los usos reglamentarios. En
España la legislación sobre armas cortas, es tremendamente estricta, para la
concesión de licencias. Fuera del círculo del mundo de la seguridad, policía,
ejército, tan sólo personas amenazadas por terrorismo, o joyeros pueden portar
un arma de estas características. Por supuesto, también está el mercado negro,
pero tampoco parece parece el arma indicada por ejemplo, para un atracador de
bancos –por su escasa capacidad de fuego a la hora de repeler un
enfrentamiento-.
Es por lo tanto un arma para distancias "cortas"
y que por lo relatado parece que requiere de precisión, puntería, y pericia en
su manejo.
Dejando el arma a un lado, y volviendo sobre los personajes
principales de este asunto:
Podríamos plantearnos entonces varias preguntas:
¿A que señores servían estos lacayos? ¿A quién
rendían cuentas de sus negocios de tráfico de drogas? ¿Quién servía la
mercancía que ellos distribuían? ¿Fueron simples hombres de paja?,¿culpables
escogidos a marchas forzadas para cuadrar un relato a todas luces inverosímil?.
¿Fue amañada por alguien la escena, en la zona del enterramiento- el paraje de
la Romana- para inculparlos rápidamente o dirigir la investigación únicamente sobre
estos dos delincuentes comunes?
Un relato sustentado en base a parajes o casetas que frecuentaban. Unos
trozos de receta médica a nombre de un familiar, que aguantaron vientos y
tempestades sin ser esparcidos por la agreste sierra dónde fueron hallados.
Un escenario del crimen irreal, sin pruebas
biológicas, ni vestigios de esa orgía de sangre. Casetas, casas
abandonadas, que se perfilaban como el
primer lugar al que las fuerzas de seguridad acudirían en las primeras horas
del rastreo para buscar a tres
adolescentes desaparecidas sin apenas dinero para pasar una noche a la
intemperie. El lugar a todas luces, menos idóneo para consumar un crimen tan
atroz que requirió tiempo suficiente, medios de ocultación, y una logística
mayor a la descrita.
Antonio Anglés ese enigmático personaje descrito como
un camello de tres al cuarto. Si uno observa vídeos de determinadas discotecas
-como ya hemos visto-, es posible hasta encontrarlo entre la multitud. Una
multitud acelerada por las drogas de la época –speed y mescalina- con estéticas
de lo más variopintas y transgresoras (tribus urbanas, góticas o estética
casual). Y allí está él, destacando entre la multitud, clásico entre los clásicos,
con su jersey anudado al cuello, elegante, estilizado y siempre bien arreglado.
Ese personaje que se nos descubre por momentos,
como un gran desconocido, como una auténtica caja de sorpresas.
Las extrañas lecturas de A. Anglés.
"Dominar la mente"
Dos de sus hermanos -Mauricio, de 15 años, y
Carlos, de 13- comentaban las actividades de Antonio durante los últimos meses.
"Veía muchas películas de vaqueros y de Fernando Esteso. También leía
libros de árabes, no con letras de árabes, sino libros de gente que se pone
así", afirmó Mauricio cruzando los brazos y las piernas, encaramado sobre
la litera del comedor. "De yoga", aclaró; "son libros de gente
negra, que es muy inteligente, que sabe cómo dominar la mente". En una de
]as habitaciones donde solía dormir Antonio, Cómo dominar la psicología,
de T. H. Swanson, y un libro escrito por dos lamas asomaban por un
cajón.
La esperpéntica descripción de las lecturas de
A.Anglés, nos deja entrever detalles muy llamativos. Extraños. Alguién que
acostumbraba a ver películas banales, sin mayor enjundia, planas, y que no
pasarán a la historia del séptimo arte, tenía sin embargo unas curiosas inquietudes
intelectuales y espirituales.
Además, según los informes que obran sobre Antonio
Anglés, este era analfabeto. Tenía conocimientos de
electricidad que aplicó durante su estancia en la cárcel.
“Antonio
Anglés, que no tiene oficio ni beneficio, habla en castellano y no se somete a
norma alguna. Ha logrado librarse hasta de la mili. En un principio creía que
quedaría exento por ser analfabeto y haber nacido en Brasil”
Es
curioso además, que estamos hablando del año 1992-93, y que en aquella época el
yoga no era para nada, algo extendido en la sociedad española, sino más bien
restringido a determinados círculos, y siempre cargado de un fuerte aura
“esotérico”. Durante el rastreo en las hemerotecas siempre me he encontrado
esta disciplina -en esa época concreta- asimilada o asociada a determinadas
sectas, algunas de las cuales operaban o tenían fuerte implantación en la
C.Valenciana.
Lo
cual no significa que esos libros constituyan prueba alguna de que Anglés
tuviera algún vínculo con alguna congregación
o secta destructiva. Pero indudablemente es llamativa esta anomalía (la
psicología & libros escritos por Lamas) . Cómo si algo no “cuadrara” dentro
del perfil barriobajero de este personaje, más bien preocupado por sus negocios
o trapicheos, la fiesta y su imagen física.
Alguno
de los pocos ejemplares del libro descrito, que se ofertan para su venta de
segunda mano, se ubican también en la
propia Comunidad Valenciana. Curioso.
Cómo
llegan esos libros concretos a manos de un personaje con un perfil como Anglés,
es otra cuestión para la que no tenemos respuesta.
Por
si fuera poco también es muy sorprendente el hallazgo de determinados enseres
en las proximidades de la fosa de la Romana, y de la caseta –escenario oficial
del triple crimen de Alcásser-
-Una cassete de Antonio Machín
-También aparece una extraña cinta de un curso
para aprender a hablar “Francés”.
Concretamente: MUESTRA 3-P: Cinta
de cassette, color negro, con inscripción "CURSO DE IDIOMAS FRANCÉS
PLANETA AGOSTINI".
-Durante el registro
de los vehículos que empleaban los dos condenados por el triple crimen… “inspecciones
oculares en los vehículos marcas OPEL CORSA V-7757-BJ y SEAT RONDA V-7660-BS,
el primero propiedad de Miguel RICART TÁRREGA y el 2º de ANTONIO ANGLÉS
MARTINS, presuntamente utilizados para el asesinato y violación de las
menores”… concretamente en el
registro de la guantera del vehículo Seat Ronda V-7670-BS, en la inspección
ocular la Guardia civil , se encuentra una muy curiosa caja de cerillas: Caja de cerillas con inscripción FLEUR d
SABANE cigarres
¿Para qué necesitaban aprender Francés dos pequeños
delincuentes comunes, traficantes de drogas? Podía ser de ellos, o de otra
persona que transitara por aquellos parajes, pero ¿Cómo llega una caja de
cerillas de una marca de tabaco “francés”, escrita en ese idioma, a la guantera de uno de los vehículos supuestamente
utilizados por los dos condenados en el triple crimen?
Si retomamos el rastro de los amigos descritos en el
post anterior, nos planteamos:
¿Quiénes son los amigos de Antonio Anglés, citados
por su hermano y apodados “El
Francés” y “ El Belga”? Un enigma más. Lo poco que conocemos es
lo siguiente:
Al novio de la hermana de Antonio Anglés, le es
preguntado en el juicio sobre este extremo:
Que conoce a muchos apodados el "francés". Que no recuerda a nadie conocido por el
"francés" 'por la familia Anglés.
Que no conoce a ningún "Francés" que tenga
un taller de coches ni que sea de origen francés y tenga relación con el caso
Otro de los hermanos (Roberto) declarará sobre este
extremo y aporta un dato interesante:
Que el apodo
"el francés", no lo recuerdo. Que recuerdo un amigo de mi hermana
K.que se llama el francés, no se si era un apodo o un nombre, era un
chaval. Conozco un chaval llamado el francés. Que aparte de eso, en aquella
época no conocía ningún francés de verdad.
Otro de los hermanos
Anglés –carlos- tampoco conoce quién es:
.
Que no
conozco a ningún francés
Que no conozco a
ningún amigo de mi hermana que se le llame el francés
Uno de los
investigadores reconoce que se hicieron gestiones para averiguar quién era el “francés”, pero
no se pudo averiguar su identidad. Y se refiere también al episodio del
contestador automático, que tanta confusión generó.
"Que el
francés ha salido mucho pero a nosotros desde el principio nos consta "soy
Rubén", el francés ha sido a posteriori, "Kelly soy Rubén dile al
rubio..." es lo que se ha manejado desde el principio. Que la trascripción
que se refiere al francés no la conozco. Que se hicieron gestiones para
averiguar quien podía ser el francés pero no le pudo averiguar. Que creo que
tuvimos conocimiento... porque era un amigo de Kelly. Que no recuerdo que
indagáramos nada sobre un argelino que fuera francés con residencia en Argelia
que fuese francés."
La prensa relataba sin embargo lo contrario, un pied
noir con un alto nivel de vida, sin ocupación conocida, y establecido en
Alberic, estaba siendo investigado. Algunos testigos –según otras noticias- que
lo situaban en diversas ocasiones en el interior de la discoteca Coloors, la
misma que frecuentaban las tres niñas de Alcásser. Este individuo vinculado al
mundo de la prostitución, al parecer
se dedicaba a captar jóvenes para participar en orgías.
Y es que los Pied Noir estaban bien asentados en la
zona de Levante, y alguno de ellos relacionados con actividades clandestinas/criminales, como prueba el hecho de que ya fueran
investigados durante el caso Lasa-Zabala –cuyos cuerpos fueron hallados
asesinados y torturados en una fosa en Bussot –Alicante-.
En esta época existe otro personaje llamémosle
"inquietante" en la comunidad Valenciana, que está en el punto de
mira, por otros asuntos criminales:
De hecho llega a ser considerado “sospechoso” en el
crimen de las prostitutas de Castellón. Las primeras indagaciones nos dejan
atisbar a un personaje muy conocido en el negocio de la prostitución –al igual
que el citado en Alberic- y la droga en Castellón. Se le conoce también con ese
apodo: “el francés”. Finalmente tras apresar a otro sospechoso, fue descartado
en la investigación del crimen de las prostitutas.
También tenemos a otro Francés conocido por sus
detenciones en redadas relacionadas con el abuso y filmación a menores –Bernard
A.- que fue investigado por dos posibles conexiones: Portugal y Castellón –
caso Madeleine mccann y el siempre muy polémico e innombrable : caso “Bar
España”. Así lo cita el diario “el mundo”(el artículo completo se encuentra en
Google con relativa facilidad )
Tenemos personajes para dar y tomar incluso un cuerpo sin identificar hallado en unos matorrales, con documentación francesa, cerca de Alberic -el lugar citado en las noticias dónde existiría el chalet del ojeador-pied-noir. Este pueblo situado también en las cercanías de Quatreronda , un pueblo que no es la primera vez que se menciona en este blog. –en esta localidad es detenido un vecino con una niña secuestrada en la zona de El Saler, cuando llega a su domicilio con la menor. Otro delincuente común sin antecedentes sexuales: ¿para quién era ese “encargo” nunca lo conoceremos?. Pero posiblemente algo se cocía en toda esa zona.
'El Francés' es Bernard A.Sospechoso de ser el secuestrador de Madeleine McCann, se defiende en un 'blog' de ayuda para encontrar a la niña británica EL MUNDO
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Tenemos personajes para dar y tomar incluso un cuerpo sin identificar hallado en unos matorrales, con documentación francesa, cerca de Alberic -el lugar citado en las noticias dónde existiría el chalet del ojeador-pied-noir. Este pueblo situado también en las cercanías de Quatreronda , un pueblo que no es la primera vez que se menciona en este blog. –en esta localidad es detenido un vecino con una niña secuestrada en la zona de El Saler, cuando llega a su domicilio con la menor. Otro delincuente común sin antecedentes sexuales: ¿para quién era ese “encargo” nunca lo conoceremos?. Pero posiblemente algo se cocía en toda esa zona.
-En las inmediaciones de la fosa y la caseta de la Romana también aparece un bloc o libreta con anotaciones en portugués.
Concretamente un cuaderno "con anotaciones manuscritas", un
"trozo de papel cuadriculado con anotaciones en tinta roja" y "un papel cuadriculado con
anotaciones, posiblemente en portugués.
(Antonio Anglés nació en Sao Paulo (Brasil). MUESTRA
C: Bloc de notas manuscritas.
La inspección de la planta baja de la caseta de
"La Romana" evidenció también la presencia de numerosas prendas de
vestir tiradas por el suelo, todas ellas de marca.
Volviendo sobre las amistades de Antonio Anglés, MIguel Ricart, en su declaración cita a algunos de
los amigos a los que anteriormente se ha referido el Mauri:
PREGUNTADO: Por
los amigos que tiene Rubén.
MANIFIESTA: Que un tal
JUAN DE VILLAMARCHANTE, UNO NEGRO llamado RICHART al que lo han pillado con
droga, que va a la discoteca CANCELA, ARABESCO, a la discoteca de TURIS,
WHUNTY, que suele ir los sábados por la noche.
Sin embargo de su boca no saldrán los misteriosos amigos "internacionales" de Antonio Anglés descritos por su hermano: (El Francés y el Belga). Sobre "El
Belga" no tenemos ningún rastro, ni en la prensa ni en el sumario. Nada de nada.
Tampoco cita a Miguel N.C. “El Marley” –que también es citado por el hermano de Anglés- un personaje verdaderamente curioso, de la
localidad de LLiria-Valencia. Este individuo también con antecedentes por
tráfico de drogas, coincide en la cárcel con Miguel Ricart en diciembre de 1992.
El chalet del Marley será frecuentado por Anglés y Ricart.
En su chalet sito en esa localidad -Lliria-, se llegó citar
que eran prostituidas menores. También
en este recinto aparecerán cajas con ropas de mujer de procedencia desconocida. Supuestamente la hija -menor de edad- de un
empresario Valenciano, era prostituida allí. El empresario contrata a una
persona para que indague sobre el paradero de su hija, y este la localiza en el
chalet de LLiria. La hija del empresario consigue huir. Al parecer dos menores
eran prostituídas en ese chalet. Finalmente este investigador privado -el señor
"A"-, recibe la orden del empresario de dar un escarmiento al
“Marley”.
Así lo describe la revista interviú:
El “señor A” ha pedido a la juez de Alcira que
instruye el sumario declarar en régimen de protección de testigos y que se
preserve su anonimato, peticiones que están siendo estudiadas por la
magistrada. Los hechos que serán relatados a la juez, y que anticipa ahora
interviú, ocurrieron en los primeros días de 1993, cuando los cadáveres de
Miriam García, Toñi Gómez y Desirée Hernández no habían sido todavía
descubiertos.
“La paliza se la di sobre el siete o el ocho de
enero de 1993 —confiesa el “señor A”—. Fue por lo que hizo con una menor que
tuvo en su casa. Cuando me preguntó por qué le pegaba, le respondí que por lo
de la niña, refiriéndome a la hija del que me hizo el encargo. Pero en aquellos
momentos «El Marley» me dijo entre gritos: «Yo a las niñas no les hice nada, yo
no he sido». Pasadas dos o tres semanas aparecieron los cadáveres de las tres
niñas de Alcásser”.
El “señor A” entró en la casa dos veces por una
ventana. “Lo registré todo y encontré cajas con ropa de mujer de diferentes
estilos y tallas
Sin duda Lliria como hemos podido comprobar en este
blog era un sitio dónde proliferaban -y siguen coleando- los asuntos turbios relacionados con
menores.
Otros investigados en relación al triple crimen:
Ricart, en prisión preventiva desde enero de 1993
en la cárcel de Herrera de la Mancha, ha implicado en varias ocasiones a un
individuo apodado el Nano y
al hermano menor del desaparecido Antonio Anglés (Mauricio). Éste, sin embargo,
asegura que no estuvo en el lugar de los hechos.
Al Nano lo acusó de haber tenido relación con una
de las niñas y que Mauricio Anglés estuvo implicado en el caso y asesinó a una
de las niñas.
¿Quién es el Nano?
Sobre este personaje, existen diversas informaciones
erróneas o contradictorias en la prensa que parecen confundir a dos de los
personajes citados, pero finalmente parece que su nombre figura en la lista de
testigos que declaran en el juicio oral:
(extracto de la declaración) José Manuel C. M.
..."Que he sido conocido por diversos apodos,
el coreano, es el mas habitual. Que antes se me conocía, me decían el nano pero cuando tenia, 13, o 14 años,
ahora tengo 30 años. Que salí de prisión en Octubre del 92.
Que a Antonio Anglés le conozco a el y a toda su
familia porque eran vecinos míos. Que eran vecinos, vivíamos en un barrio, del
barrio de Corea, y entonces ellos vivían al lado del nuestro Que he tenido
adicción a la heroína. Que a Miguel Ricart no lo conocía. Que no lo conocía.
Que al otro sí, y a su familia. Que en relación a la adicción a las drogas, la
compraba la droga al río, al lado de Nuevo Centro, y a ningún sitio más. Que no
iba a ningún sitio de Valencia. Que también iba a comprar droga al barrio
chino"
Lo curioso es lo que se cita en la prensa:
Miguel Ricart sobre este extremo dirá lo siguiente:
“Ricart negó
haber invitado a este hombre a una orgía, si bien matizó que desconocía si
Anglés lo había hecho. De cualquier forma manifestó, que no creía que el Nano
fuera capaz de cometer tantas barbaridades”.(ABC)
Delincuentes comunes, yonkis, droga, discotecas. Un
relato que se mueve entre personajes demasiado secundarios, que parecen cerrar
en falso este misterio insondable. Eslabones perdidos de una historia que no
parece tener fin. Inverosímil relato
oficial de los hechos, nula reconstrucción, y llamativamente ausentes en este
caso, los dictámenes de los sabios y versados gurús de la
materia criminal del país, en una de las páginas más negras de la historia criminal
española.
Crimen demasiado complejo, macabro y oscuro para ser fruto de la locura transitoria de dos pandilleros trapicheros de un
pueblo-suburbio de la capital de Valenciana.
Silencio y condena. Pero la herida sigue abierta.
Sangrante. Imposible olvidar.
…Un destacado forense de Valencia -participante en las autopsias- comparte
las dudas de otras personas conocedoras de la investigación: -¿Usted cree que
con esas pruebas y la única declaración de Ricart se puede condenar a alguien?
¿Nos quedaremos tranquilos mandando a la cárcel a uno sólo de un grupo tan
numeroso? Si el abogado de Ricart es bueno, no habrá quien lo condene… (diario “El país”)