La resolución de los casos se complicaba, y toda la
investigación dará un vuelco definitivo. Las hipótesis pasaron de hablar de un
único asesino en serie, a convertirse en certezas, al descubrirse la existencia
de al menos dos autores –sin aparente conexión entre ellos- de dos asesinatos.
Algo que resulta verdaderamente muy llamativo teniendo en cuenta las
manifiestas coincidencias tanto del modus operandi, como de las “muy concretas”
e inusuales mutilaciones y
evisceraciones practicadas a los cuerpos.
Análisis motivacional de las heridas:
Del análisis del patrón de las heridas se puede llegar a saber cual es la intención del criminal. En el caso que nos ocupa podría tratarse de un patrón de heridas con una motivación del tipo "experimental", producidas por el autor-es mediante conductas físicamente agresivas cuya intención es satisfacer necesidades de tipo psicológico experimentando nuevas sensaciones. Su motivación no es el daño que pueda causar a la víctima sino la experimentación como acto tentativo, exploratorio. La víctima pasa a convertirse en un mero instrumento para realizar esa exploración. No requiere una víctima consciente. Por ejemplo extirpación de partes del cuerpo para realizar actos de canibalismo. Si bien parece haber un transfondo sexual, a veces este tipo de heridas requieren un análisis sutil ya que podemos encontrar heridas más punitivas que sexuales, o incluso experimentales, aunque aparenten estar motivadas sexualmente. Por ejemplo heridas de desgarro en órganos genitales. Estarían encuadradas dentro de aquellas conductas lesivas intencionadas que satisfacen necesidades psicológicas, como las experimentales, que reflejan actos de ritual.
El RITUAL es el patrón de conductas del agresor que satisfacen sus necesidades psicológicas y emocionales -sus fantasías-. Van más allá de las conductas de modus operandi. Añaden matices y precisamente por satisfacer necesidades íntimas del agresor pueden resultar tan peculiares que le diferencien del resto de delincuentes. Ejemplos de conductas de ritual serían realizar determinados actos sexuales, ejecutarlos en un orden concreto, controlar a la víctima con un tipo especial de ataduras -caso Alcásser / ligaduras de doble nudo- infligir determinadas heridas, disponer la escena del delito de determinado modo -colocar vísceras en el buzon de correos/estación perpignan- ejecutar determinadas conductas repetitivas o rituales, proferir determinadas expresiones u obligar a la víctima a realizarlas. ("Manual de investigación psicológica del delito-el método VERA")
En el caso de Perpignan además faltaban partes de las víctimas. Si toma
TROFEOS probablemente serán aquellas partes del cadáver con mayor valor
identificativo –cabeza y manos- con la finalidad de dificultar la
identificación del cuerpo.
-También los asesinos del tipo Visionario/ psicóticos
–desorganizados- actúan bajo alucinaciones, que le atormentan e impulsan a matar. Se involucra con los cuerpos de sus
víctimas.
Además se llevó los objetos personales de las víctimas, y tanto estos como sus ropas nunca aparecieron. Si la víctima aparece
totalmente desprovista de efectos personales y MUTILADA , con seguridad nos encontramos ante un asesino ORGANIZADO. El
despojamiento de sus pertenencias supone también el despojamiento de su
identidad, y esto sirve para satisfacer una de las pulsiones recurrentes de
estos criminales: la completa humillación de sus víctimas. Si faltan
objetos personales, debe servir de faro para alertar sobre la posibilidad de
revisitación del cadáver, por parte del asesino.
En los asesinos organizados también se encuentra la categoría del tipo Lujurioso: satisfación sexual perversa, ritualización de sus actos. Estos asesinos emplean su tiempo en los crímenes, para así satisfacer
plenamente sus instintos sexuales. Los crímenes incluyen antropofagia, desmenbramiento, necrofilia, tortura, mutilación, actos de dominación y
humillación. Muestran elevados rasgos psicopáticos con fuerte tendencia al sadismo. Muy organizado. Nuevamente observamos la convivencia de distintos perfiles criminales -organizado/desorganizado-.
*Primer asesinato esclarecido:
De acuerdo con un testigo, que vio el modelo, color y una parte de la
matrícula del coche en el que Fátima fue secuestrada, un gerente de bar, casado
y padre fue detenido. Finalmente confesó durante la custodia y admitió el
asesinato de Fátima, a quien conocía de una tienda donde fue cajero. Después,
ha asegurado a los investigadores que
había hecho desaparecer el cuerpo en Port-Vendres. Finalmente encontraron el cuerpo desnudo de Fátima en la orilla de
la piscina de Canet cerca de la casa del presunto asesino. El 18 de junio, Marc
Delpech es condenado a treinta años de prisión, incluyendo veinte de prisión
sin remisión por el Tribunal de la Corona de los Pirineos Orientales por el
secuestro, la violación y el asesinato de Fátima Idrahou, sentencia confirmada
en el informe de la apelación el 1 de julio de 2005. Aunque la sospecha pesa
sobre él (la policía descubrió en su
casa recortes de prensa relativos s cuatro asesinatos y un comienzo preocupante
de una novela policíaca llamada "Tatiana" en su ordenador que
detallaba exactamente las circunstancias del secuestro de Tatiana Andújar. No
fue perseguido legalmente por las otras tres desaparecidas.
*Segundo asesinato esclarecido.
A mediados de octubre de 2014, el ADN del
agresor de Mokhtaria Chaïb fue identificado como el de un hombre de cincuenta y
cuatro años de edad, padre de cuatro
hijos (de dos relaciones diferentes), que estuvo viviendo en Perpignan desde
1997, que es exactamente el año del asesinato de Mokhtaria. El presunto asesino
Jacques Rançon, (tendero del Hailles tenía varias condenas por asalto sexual
y violencia , incluyendo ocho años con
remisión a causa de la violación de una mujer por el Tribunal de la Corona en
Picardía). Confesó la violación y el
asesinato de Mokhtaria Chaïb en
diciembre de 1997, no lejos de la estación de tren de Perpignan. Después de dos
largos días de interrogatorio, después de trasladarse a los lugares donde
encontraron el cuerpo de la joven estudiante, -
el tendero, finalmente, confesó. “
esa noche, se cruzó con Mokhtaria. Esa misma noche, la violó, luego la
llevó a la fuerza a un terreno inhóspito, dónde le asestó un golpe mortal, y
cortó sus pechos y el pubís.”
Para los agentes, fue cómo si el
detenido hubiese regresado al pasado. Además de presentarle las pruebas que tenían en contra de él
(restos de su ADN en el zapato de la víctima), su traslado al escenario del
crimen, a la misma hora en que ocurrieron los hechos, hizo que el autor del
crimen volviera de alguna manera a trasladarse a aquel día.
No pudo ser acusado de tener
relación con los otros asesinatos y desapariciones. Si bien el modus operandi
coincidía, y las mutilaciones eran similares. El cuerpo de Marie-Helene
González fue encontrado mutilado, con los órganos genitales seccionados, cerca
de la salida de la autopista Perpignan Sud, muy cerca de donde el tendero había
hecho trabajos temporales. La cabeza del cuerpo y sus manos fueron encontradas
en una bolsa de basura seis meses después.
Como denominador común en todos
los casos, de las cuatro víctimas, tres fueron encontradas mutiladas y
desnudas, además sus efectos personales no fueron hallados jamás. El cuerpo de
una de ellas nunca apareció.
Si Marc Delpech y Jacques Ransom,
respectivamente confesaron el asesinato de Fátima Idrahou y Mokhtaria Chaib,
otras dos desapariciones aún no se han esclarecido (las de Tatiana Andújar y
Marie-Hélène González).
Todavía un último elemento
inquietante iba a perturbar y enmarañar más la resolución de los casos.
La desaparición de otras tres mujeres. (Simona, Allison y su madre Marie J.)
En el año 2013, en la misma
localidad de Perpignan desaparecen dos mujeres –madre e hija-. Francisco B. un legionario español
perteneciente a la Legion Extranjera destinado en Perpignan, denunció su
desaparición.
La policía al iniciar la
investigación se dio de cuenta de que este hombre ya había sido investigado por
la desaparición de una antigua compañera.
Paco B. nació en Algeciras en 1963 y se crió
en Ceuta. A los 20 años se mudó con la
familia a Sevilla. En 1986 se alistó en la Legión Extranjera con su verdadera
identidad. No necesitaba borrar su pasado en el Ejército francés porque no
tenía antecedentes penales en España. Destinado en misiones en el Golfo
Pérsico, Kosovo y Gabón, fue condecorado con la Cruz de Guerra y la Medalla
Militar.
En 1988 conoció en Marsella a
Marie-Josée y se fue a vivir con ella junto a sus cuatro hijos de otros tantos
padres diferentes. Fruto de la unión, en 1994 nació Allison. Cuando la pequeña
apenas tenía cuatro años, inició una vida paralela en Nîmes. Se lió con Simona
de Oliveira Alves, una brasileña de 23 años, madre también de cuatro hijos pero
del mismo padre, del que estaba separada. La joven, empleada en un bar de
alterne, desapareció el 29 de noviembre de 2004. Los vecinos, testigos de las
violentas disputas de la pareja, vieron la víspera al legionario traerla a casa
desde el hospital, donde había ingresado dicen que por un aborto o una
tentativa de suicidio. El militar gaditano prestó declaración ante la Justicia,
que archivó el caso en 2008. Simona nunca apareció.
El pasado 22 de julio Paco
denunció en comisaría la desaparición de Marie-Josée y de Allison. Dijo que se
habían marchado del hogar el 14 de julio tras hacer las maletas con intención
de ir a Toulouse. Pero ni sus móviles ni sus cuentas bancarias han registrado
movimientos desde entonces. Además los amigos de Allison aseguran que no se
habría perdido por nada del mundo los preparativos del concurso de Miss
Rosellón, al que se iba a presentar este verano y en el que era clara favorita.
De nuevo, como una auténtica
“maldición” observamos como un “tercer” sospechoso de estar implicado en la
desaparición de mujeres en Perpignan muere en extrañas circunstancias. Suicidio.
Al alba del 5 de agosto el cuerpo
de Paco apareció colgado en la fachada de un patio interior del cuartel. Se
había defenestrado de uniforme con una soga al cuello atada a una ventana y la
cabeza cubierta con un pañuelo oscuro. En un correo electrónico enviado al
comandante y sus compañeros de armas les pedía que no le juzgaran y se
confesaba «al límite de mis fuerzas». En un mensaje grabado en vídeo se le ve
muy emocionado explicar entre sollozos que su familia tenía altibajos «como
todas» y que su hija era «lo más importante de mi vida».
La Policía Judicial ha encontrado
rastros de la sangre de Allison en dos lugares del cuartel de Perpiñán. En el
colector de evacuación de un congelador que un soldado había ayudado a Paco a
trasladar el 17 de julio desde su domicilio. Y en manchas localizadas en la
lavadora que utilizaba en el acuartelamiento donde lo vieron lavar sábanas y
ropa por aquellas fechas.
Búsqueda de los cuerpos:
Mientras el caso de la
desaparición de Simona ha sido reabierto en Nîmes, continúa la intensa búsqueda
de los restos de Marie-Josée y Allison. El rastreo se focaliza en un bosque de 50 hectáreas junto al
mar al que, gracias al GPS de su móvil, se sabe que Paco el legionario acudió varias veces
a horas incoherentes los días siguientes al 14 de julio. Con la ayuda de perros
adiestrados, se confía en desenterrar los últimos secretos que no se llevó a la
tumba el novio de la muerte.
Los investigadores continúan trabajando sobre todos estos casos –después de veinte años- tratando de poner
fin a esta inacabable pesadilla.
Pero si hay algo que salta a la vista, y es realmente llamativo, es el gran parecido físico de todas las víctimas /jóvenes desaparecidas en Perpignan. Allison, Simona, y las cuatro chicas desaparecidas cerca de la estación de tren.
Guapas, delgadas, melena morena, y ojos negros.